El Convento de la Victoria, anteriormente perteneciente a los Frailes Mínimos de San Francisco de Paula, en la actualidad alberga la Congregación de Religiosas Terciarias.
Este lugar histórico, cuya construcción se llevó a cabo entre 1712 y 1718, destaca por su fascinante arquitectura tanto en planta como en alzado.
La fachada, realizada en piedra de sillería, impresiona con su balcón central volado y sus detalles laterales que sugieren una apariencia civil más que religiosa.
El interior del templo presenta un diseño de planta central excepcionalmente elaborado, la nave octogonal junto con una capilla mayor de planta hexagonal, crea una estructura espacial inusual pero impresionante. La decoración interior, aunque menos profusa que en otros lugares de culto, destaca por la meticulosa molturación del entablamento que recorre todo el recinto.
El camarín, con sus primitivas yeserías del siglo XVIII, añade otro nivel de encanto histórico a este lugar sagrado. Además, los retablos ensamblados dorados, los lienzos pictóricos y la custodia dorada son solo algunas de las joyas artísticas que adornan el interior de esta iglesia única.
Desde su abandono por parte de los Frailes Mínimos como resultado de la Desamortización en el siglo XIX, el Convento de la Victoria ha sido testigo de una nueva vida bajo el cuidado de la Congregación de Religiosas Terciarias. Su singular arquitectura y su rica historia lo convierten en un destino imperdible para los amantes del arte y la cultura en Antequera.
¿Eres amante de la cultura y el arte de Antequera? ¡Visita el Convento de la Victoria!
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